Una pandemia es una buena excusa para aplazar nuestros planes

Esta pandemia da para todo, incluso para justificar la inacción y el postergar de forma “involuntaria”, cualquier plan que tuviesemos en mente, ejecutar. Son interminables los testimonios que expresan arruinados sus planes y prácticamente su año, por causa de la situación persistente de un virus entre nosotros.

Y definitivamente no les puedo quitar razón, porque ciertamente hay cualquier cantidad de sectores afectados, de cosas que por más que queramos llevar a cabo, no se puede y punto. Lo que quiero es que evitemos caer en la excusa perfecta para aplazar planes e incluso para justificar nuestros fracasos.

Siempre hay algo que sí podemos hacer, siempre hay un contacto que podamos establecer, una información que podamos leer, un proyecto que plantear o replantear… E incluso podemos reinventarnos y ver cómo de esto sacamos el mayor provecho.

Sí, solemos cortocircuitarnos cuando las cosas se salen de los parámetros a los cuales estamos acostumbrados. Pero si no queremos desaprovechar el tiempo, sino por el contrario sacar de cada situación el mayor provecho posible, debemos cambiar la perspectiva por una que nos ayude a mirar las oportunidades en esta situación.

Aprovechando los recursos

La tecnología en esta época se ha convertido en nuestra mayor aliada. Quizás esto era algo que necesitábamos para romper un poco las resistencias ante la necesidad de la presencia o ante poder dar curso a las cosas de manera remota. Podemos aprender prácticamente todo, tenemos acceso a un mundo ilimitado de información, podemos encontrar asesores en todas las áreas y de seguro podemos encontrar muchos modelos que nos pueden ayudar a alcanzar nuestros más grandes proyectos, incluso esos que llamamos románticamente nuestros sueños.

Muchas veces resulta más sencillo colocarnos excusas ante lo grandiosos que somos y no buscamos la manera de crecer, porque de alguna manera sentimos que ese estancamiento puede estar perfectamente justificado en determinadas circunstancias. Pero ¿a quién engañamos? ¿Quién más allá de nosotros mismos puede verse interesado en que vayamos por más? La verdad es que muy pocas personas realmente desean el crecimiento de quienes le rodean, a menos que vean algún beneficio personal en ello.

Incluso podemos decir que el fracaso colectivo es un aliciente… Bueno a todos nos va mal, todos hemos perdido nuestros empleos, ya nos hemos comido los ahorros, ya vendrán otros tiempos, en los cuales sí podamos, en los que las condiciones estén dadas… Ojo, sí, vendrán mejores tiempos, ¡seguramente vendrán mejores tiempos! Pero revisa ¿qué estás haciendo justo ahora para sacar el mayor provecho a lo que ocurre?

La dirección es más importante que la velocidad

No importa si estás dando pequeños o grandes pasos, lo más significativo es que estén avanzando o al menos buscando la manera de avanzar de acuerdo al norte que te hayas trazado… Sin importar lo que hizo o no el de al lado. Hay muchas vías para avanzar. No optes por lo más sencillo, no optes por justificarte ante una situación global, porque solo como motivo de inspiración, te menciono que hay muchas personas en este momento reconectándose con quienes son en esencia, que se están reinventando, que están innovando, que están levantando negocios emergentes altamente lucrativos y prometedores.

Decide en qué parte de la balanza quieres estar, lo que sea que hagas estará bien visto. Si decides simplemente esperar a que esto pase, tendrás un buen argumento y si quizás te importa la opinión de los demás, pues estarán más que tranquilos con tu estatus. Si optas por sacar provecho, será mejor que mejor, te aseguro que hallarás inspiración para lo que quiera que desees hacer, así sea dejar todo totalmente listo para el despegue cuando alguna condición no dada ahora, lo permita.

Solo recuerda que cualquier tiempo es de provecho.

Por: Sara Espejo – Reencontrate.guru