Nos podemos acostumbrar con cierta facilidad a conductas, situaciones y personas que no nos convienen en absoluto. Sin embargo, su presencia en nuestras vidas nos habla de lo que estamos atrayendo. Todos atraemos experiencias a través de quiénes somos y lo que irradiamos al universo. Para elevar nuestra vibración, la cual nos hace sintonizar con nuestras experiencias, podemos adoptar ligeros cambios, que si nos acostumbramos a ellos, veremos increíbles cambios positivos en nuestras vidas.
Por lo tanto hoy quiero traerte un listado de cosas a las que te deberías acostumbrar:
- Acostúmbrate a ser agradecido, di gracias, no solo por cortesía, sino apreciando realmente algo en tu vida.
- Acostúmbrate a hablar de las cosas que van bien en tu vida en lugar de hablar de tus problemas.
- Acostúmbrate a mirar a los ojos a las personas que te hablan, pon en pausa el celular, aparta cualquier distracción, mientras alguien se dirige a ti.
- Acostúmbrate a dedicarte tiempo de calidad, haz lo que quieras, incluso cuando esto sea no hacer nada.
- Acostúmbrate a decir que no cuando algo no te nace o te incomoda.
- Acostúmbrate a mirar por tu ventana y levantar tu mirada al cielo, siempre tiene algo bello que mostrarte.
- Acostúmbrate a poner tu cuerpo en movimiento, haz ejercicio, baila, camina.
- Acostúmbrate a mirar las cosas positivas en todo lo que te ocurre, de todo se puede rescatar algo bueno.
- Acostúmbrate a llamar a las personas que aprecias y hacerte sentir.
- Acostúmbrate a respetar la opinión de los demás aunque no estés de acuerdo con ella.
- Acostúmbrate a aprender nuevas maneras de hacer una misma cosa, sé humilde y agradece todo nuevo conocimiento en tu vida.
- Acostúmbrate a cuidarte, a quererte, a respetarte, a darte el primer lugar en tu lista de prioridades.
- Acostúmbrate a no permitir que nadie te irrespete o te menosprecie.
- Acostúmbrate a ser compasivo con los demás, todos vamos en caminos particulares haciendo lo mejor que podemos.
- Acostúmbrate a encontrar placer en dar y en recibir, a veces solo somos buenos para dar o para recibir, pero tenemos que estar a gusto en ambos roles.
- Acostúmbrate a sentirte suficiente, tanto para ti como para los demás.
- Acostúmbrate a hablarte con la verdad, el autoengaño es lo que más frustración genera.
- Acostúmbrate a decir las cosas desde el amor y no desde la rabia, podemos dar el mismo mensaje sin lastimar a otros o a nosotros mismos.
- Acostúmbrate a sembrar lo que te gustaría algún día cosechar, la vida es un bumerán, sin ser interesados, demos lo que nos gustaría que nos dieran a nosotros.
- Acostúmbrate a viajar, a conocer nuevos lugares, nuevas personas, nuevas comidas, la vida es corta y las experiencias son infinitas.
- Acostúmbrate a confiar en el proceso de la vida. La vida es como sientas que es, si sientes que es bella, así será, si sientes que es difícil, también será así.
- Acostúmbrate a pensar positivo, monitorea tus pensamientos y procura alejar esos pensamientos que no te hacen sentir bien.
- Acostúmbrate a darle el justo valor al tiempo y no desperdiciarlo, no seas su esclavo, pero tampoco le restes total importancia, es el marco en el cual desarrollamos nuestras vidas, por más ilusorio que sea, nos ajustamos a él.
- Acostúmbrate a sumar a la vida de los demás. Da, si no puedes dar algo positivo, al menos no perjudiques la vida de nadie.
- Acostúmbrate a seguir tus sueños, escucha tu corazón e identifica lo que te hace feliz.
- Acostúmbrate a desplegar tus alas y volar, no las escondas, no permitas que venga alguien a cortártelas, son tuyas y debes hacer el mejor uso de ellas.
Mientras te acostumbras a cosas que te hacen vibrar alto, te alejas de lo contrario… Y la recomendación que no puede faltar: ¡Acostúmbrate a ser feliz!
Por: Sara Espejo – Reencontrate.guru