De las mejores cosas de este año: ¡Tú!

Hoy quiero que nos tomemos un momento para apreciar y agradecer a la vida por esa o esas personas que hacen nuestra vida y nuestro mundo algo más bonito. Que sin ellos, nuestra vida sería diferente. Reconocer la presencia y la influencia de nuestras personas especiales es una de las bases de la felicidad.

Por esas personas que nos levantan cuando estamos caídos, por esas palabras oportunas que nos ubican en una mejor posición, por esa canción que nos dedican y hasta nos componen cuando menos lo esperamos, por esas personas que pueden incluso estar lejos y de igual manera nos abrigan el alma, no podemos hacer menos que acomodarlas en nuestros corazones y hacer que se sientan lo más cómodos posibles.

No importa si es un activo que recién adquirimos, si llevan mucho tiempo en nuestras vidas, si es nuestra pareja, nuestro hijo o algún amigo, lo importante es pensar en esas personas y dedicarles al menos una sonrisa, por lo bueno que han generado en nuestras vidas.

Nuestra capacidad de amar es infinita, sin embargo, nuestra alma pareciese reconocer a esas personas con quienes quiere enriquecer su recorrido y ofrecerles lugares exclusivos.

Cuidar de nuestros afectos, agradecerles su presencia, su existencia y agradecer lo que hizo posible que coincidiéramos entre tantas almas, resulta una práctica saludable, que nos permite mirar con los ojos del corazón, con bondad, con empatía, procurando para el otro, lo que deseamos para nosotros mismos.

Agradece por esas personas que vinieron a mostrarte las mejores cosas de la vida, que vinieron a despertar en ti los más lindos sentimientos. Agradece por ese espejo a través del cual ves normalmente lo mejor de ti y es una oportunidad constante para identificar cualquier detalle que debas mejorar.

Cada persona que se nos acerca es un maestro, de todos podemos aprender de forma continua. Para ello debemos ser humildes y abrir nuestra mente y nuestro corazón para absorber todo lo que se convertirá en crecimiento. Así mismo, el poder decir presente en la vida de alguien, procurando mejorar al menos en algo su vida, es un privilegio que debemos tomar con delicadeza y jamás desperdiciarlo. Porque a fin de cuentas, todos somos uno y todos somos a través del otro.

Eres una de mis personas especiales porque me veo en tus ojos, porque me reflejo en ti, porque me descubro a través de ti y aquello que tú eres para mí, es lo que yo soy capaz de percibir. No vemos en el otro lo que no llevamos, por eso, estemos alerta cuando solo veamos maldad, envidia, rencor a nuestro alrededor, porque eso nos habla de que debemos hacer una revisión profunda de lo que llevamos dentro.

Te dedico hoy en especial mis pensamientos, mis mejores deseos, mi agradecimiento y le digo a la vida fuerte y claro que eres una de las personas que quiero mantener y preservar el año entrante y todos los venideros. Gracias por hacer mi vida diferente, por agregarle a mi vida colores distintos, que quizás nunca había podido apreciar.

Quiero que tu vida esté llena de las más hermosas bendiciones, que creas en ti y en tu poder creador, que te apoyes en lo que necesites para vivir la vida que deseas y sería para mí un privilegio si dentro de esos apoyos estoy yo, para poder retribuir de alguna manera lo que tú le aportas a mi vida.

Mis mejores deseos para este año entrante y no te olvides de desechar todo lo que reste antes de entrar en esa nueva aventura llamada 2020. Tú decides que te llevas, asegúrate de que sea solo lo que sume… ¡Nos vemos del otro lado!

¡Feliz 2020!

Por: Sara Espejo – Reecnotrate.guru