Te llevaste tanto de mí, que hasta mis miedos se fueron contigo

Te llevaste tanto de mí, que hasta mis miedos se fueron contigo
Comparte

Luego de sentir mi vida hecha pedazos, en donde no podía ni siquiera reconocer mi propia existencia, como siempre la tormenta pasó… Mi vida que quedó tambaleante con tu partida, era de todo un poco, la sentía incompleta, asumía que era tu ausencia… Te extrañaba tanto que a pocas cosas le podía dar sentido. Poco a poco, mientras me armaba, me di cuenta, de que faltaba mucho de lo que antes era.

Tomaba una pausa dentro de mi reconstrucción, buscando alrededor lo que sabía que me pertenecía y ya no estaba… y en definitiva, tuve que aceptar que una parte de mí se fue contigo. Finalmente me armé, no sobraban piezas, no había fragmentos sueltos que no haya podido encajar, pero sorprendentemente tampoco había espacios vacíos, estaba completa y era una versión muy diferente a la que había sido anteriormente.

Siempre había escuchado que el dolor te cambia, que las ausencias te transforman y sí, es cierto. Sin embargo, no puedo evitar darte las gracias, porque en definitiva AMO la nueva versión de mí… Saliste de mi vida, te llevaste una parte importante de mí, me cambiaste mis proyectos, pero también te llevaste todo lo que me atemorizaba y vivir sin miedos es sin duda algo que no tiene precio.

Soy una nueva persona, para bien, sé todo lo que soy capaz de afrontar y sé que soy capaz de seguir adelante. Sé que puedo entregarme en cuerpo y alma y ante el peor escenario de todos, me volveré a armar y siempre resultará una mejor versión de mí. No tengo miedo a perder nada, porque te di tanta importancia, que cuando te marchaste, sentí que lo perdía todo y me di cuenta de que no podía estar más equivocada.

Perdemos cuando nos quedamos junto a alguien que no nos valora, perdemos cuando dejamos de lado nuestros sueños, por los sueños de alguien más, perdemos cuando nos acostumbramos al maltrato o soportamos situaciones que nos lastiman. El estar con alguien que no corresponde nuestro amor y nos utiliza es perder… Que la vida te dé una nueva oportunidad y tú decidas por ti, incluso cuando pienses que es una decisión forzada, es sin duda una ganancia, la más grande de todas.

Ya no tengo miedo a no ser aceptada, me adapté a ti, a lo que querías y eso no fue garantía para recibir algo de ti que sumara a mi vida… Ahora sé que nada como ser yo misma, nada como atraer a las personas que me amarán por lo que soy y no por lo que soy capaz de hacer por ellos. Me encontré en esos muchos pedazos y créeme cuando te digo que me siento liberada y en gran parte te lo debo a ti y a la experiencia que pasé contigo.

Al final te das cuenta de que todo tiene sentido, hasta lo más descabellado, hasta la relación más dolorosa, termina por aportarte quizás lo que te resultará más útil el resto de tu vida. Así que sí, dejé de amarte, pero siento por ti tanto agradecimiento, que sé que te quedarás grabado en mi vida como esas personas que marcan un antes y un después.

miedos

Tú me enseñaste a amarme, a darme valor, a conocerme… Tú sin saberlo me diste lo que necesitaba para reconciliarme conmigo y seguir adelante sin miedos, con la plena confianza de que lo mejor está por venir y con la certeza de que estoy preparada para engrandecerme con cada una de las experiencias que esté por vivir.

No sé qué hiciste con lo que te llevaste, pero cambiaste mi vida por completo y ahora me corresponde seguir adelante con esta nueva versión de mí que me llena de orgullo y me hace sentir que estoy en mi mejor momento.

Por: Sara Espejo – Reencontrate.gurú


Sara Espejo

One thought on “Te llevaste tanto de mí, que hasta mis miedos se fueron contigo

Comments are closed.