Tu corazón siente, recuerda, razona y aprende… Tu corazón es inteligente

En esta ocasión, vamos a hablar sobre la inteligencia del corazón… ¡Así es! ¡El corazón tiene su propia inteligencia!… puede sentir, aprender, recordar y tomar decisiones.

De hecho, este maravilloso órgano posee un sistema de neuronas que le otorgan una memoria. A este sistema se le conoce como el cerebro del corazón. 

¡Ojo!… esto no quiere decir que nuestra inteligencia cerebral queda en segundo plano. Todo lo contrario, nuestro corazón está comunicándose constantemente con nuestro cerebro y lo hace a través del sistema nervioso y del campo electromagnético que este emana. 

Este proceso de comunicación se ve afectado cuando estamos estresados o pasando por procesos emocionales negativos. En cambio, cuando estamos en calma, nuestro patrón cardiaco es más estable y facilita nuestra función cognitiva.

En función de lo anterior, hay tres maneras de estimular una comunicación sana y coherente entre nuestro corazón y nuestro cerebro. Te las explicamos a continuación:

La inteligencia del corazón

Hay un dicho popular que expresa lo siguiente:

La cabeza piensa y el corazón siente.

Sin embargo, la neurocardiología, como ciencia encargada del estudio de los aspectos neurofisiológicos, neurológicos y neuroanatómicos de la cardiología; ha encontrado que el corazón posee aproximadamente 40.000 neuronas que lo dotan de inteligencia. Así pues, se concluye que el corazón no solo siente, sino que también puede procesar y memorizar información.

Hay que escuchar a la cabeza, pero dejar hablar al corazón.

Marguerite Yourcenar

Ahora bien, el corazón frecuentemente envía información al cerebro y lo hace a través de cuatro formas de comunicación:

• La comunicación neuronal, la cual se da por medio de nuestro sistema nervioso.
• La comunicación biofísica, que tiene que ver con nuestro pulso cardiaco.
• La mensajería bioquímica, relacionada con el conjunto de hormonas que secreta nuestro músculo cardiaco.
• El campo electromagnético, específicamente, el emitido por el corazón.

Por tanto, para que logres establecer un proceso de comunicación cerebro-corazón, que esté orientado en la coherencia y la armonía, los expertos recomiendan que lleves a cabo las siguientes técnicas:

1. Practica la respiración consciente

Practicar ejercicios de respiración profunda y pausada, favorece el feedback que debe existir entre el corazón y el cerebro, haciendo que este proceso sea consecuente y sistemático. Como resultado, la persona podrá pensar con claridad, tomar decisiones, recordar, prestar atención, razonar o resolver cualquier tipo de problemas.

Este tipo de respiración es mejor conocida como: respiración consciente o respiración centrada en el corazón. En corrientes como el budismo, esta técnica es utilizada para desarrollar la inteligencia del corazón, así como la compasión entre sus fieles.

Un ejercicio sencillo de respiración consciente, consiste en inhalar lentamente durante un periodo de 6 segundos; y exhalar lentamente durante otro periodo de 6 segundos. La respiración debe ser pausada y debe realizarse a unos cinco ciclos por minuto.

2. Da lugar a emociones positivas

Otra forma de estimular la comunicación bidireccional entre cerebro y corazón, es a través de las emociones positivas. Así que, dales un lugar en tu vida.

El amor, la gratitud, la apreciación, la esperanza y la compasión, contribuyen con la sincronía de nuestro ritmo cardiaco. Esto último, aporta grandes beneficios a nuestra salud mental y emocional, tales como: una mejor estabilidad, una buena memoria, un funcionamiento mental óptimo y una mayor concentración.

3. Practica la meditación

Muchos estudios médicos y científicos han demostrado que la meditación combate todo tipo de emociones negativas, lo cual beneficia en gran medida a nuestra comunicación cerebro-corazón. Además, meditar por periodos diarios de 15 a 20 minutos, disminuye el riesgo de tener accidentes cerebrovasculares y previene la aparición de infartos.

Hoy en día, existen muchas técnicas de meditación que se enfocan en el bienestar de nuestro cerebro y corazón. La más destacada de todas es la técnica de meditación Mindfullness y puedes encontrar mucha información sobre ella en la Web.

6 verdades sobre nuestro corazón

Más allá de ser un músculo que bombea la sangre a todos los tejidos del cuerpo humano, hay algunos hechos que describen al corazón como un órgano maravilloso. Entre estos se destacan los siguientes:

1. Este empieza a latir en el feto de una mujer embarazada, mucho antes de que el cerebro se haya formado.
2. Posee un sistema neuronal que le otorga una memoria a corto y a largo plazo.
3. Emite una gran cantidad de campos electromagnéticos que cambian de acuerdo a nuestras emociones.
4. Suele enviar mucha más información al cerebro, que la que recibe de él.
5. Tiene la capacidad de sincronizarse con las distintas funciones orgánicas de nuestro cuerpo, de modo que estas puedan operar en armonía.
6. En la Biblia, es mencionado como la puerta para el descubrimiento de nuestra vida.

Por último, hay que resaltar que en esta relación cerebro-corazón, ambos órganos mandan. Es decir, uno depende del otro y viceversa. Aunque no cabe duda que, para tener una vida saludable y una mente sana, es importante que desarrolles la inteligencia del corazón. Así que, empieza a practicar las técnicas que te hemos brindado aquí.

La única manera de cambiar la mente de alguien es conectar con ella a través del corazón.

Rasheed Ogunlaru

¡Mucha salud y muchos éxitos!

Por: Adrian Alberto ∼ reencontrate.guru

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